EFE.
Las asociaciones y entidades taurinas francesas crearon ayer en Arles el Observatorio de las Culturas Taurinas para defender la Fiesta en el país. El Observatorio fue lanzado con una gran manifestación dentro de la feria.
Fuente: www.abc.es
Publicación digital de eventos taurinos de la Región de Murcia
EFE.
Ganadería: toros de Juan Pedro Domecq, grandes y zancudos, altones y bastotes, sospechosos de pitones, bajos de raza y de escasas fuerzas.
Enrique Ponce: estocada (una oreja tras un aviso); y dos pinchazos, estocada y dos descabellos (una oreja tras dos avisos).
José María Manzanares: estocada (palmas); y metisaca, pinchazo y estocada (silencio tras un aviso).
David Esteve: pinchazo, estocada que asoma saliendo trompicado y tres descabellos (silencio tras aviso); pinchazo, media que se traga y descabello (silencio tras un aviso).
Plaza: Valencia. Lleno en tarde de nubes y claros, viento y frío.
A Ponce le han dado una oreja después de dos pinchazos, una estocada y dos descabellos, además de dos avisos. Y no ha influido el paisanaje. Hay que imaginar lo que hubiera sido si mata a la primera. Sin más rodeos, sencillamente le dan el rabo. Porque fue faena de eso, y no por haber sucedido aquí en Valencia que es su tierra, sino en cualquier otra plaza, de cuanta más categoría más segura la reacción del público a su favor.
Nadie daba tres céntimos de euro (lo que antes era un duro) por la faena en base al toro. Ese puede ser uno de los méritos grandes de Ponce, su apuesta por el triunfo, como ya había hecho en el toro que abrió plaza.
En aquel fue la habilidad, la forma de venderlo, para que aparentara una grandeza que ni por asomo se podía adivinar, con ¿un toro? que resultó el colmo del descastamiento, blando y parado, que se defendía y se venía al cuerpo, escarbador y sin rematar sus escasos y muy intermitentes viajes. Así y todo obró el milagro de apuntalarlo, obligándole a pasar. Primero el astado, y después el público, terminaron metidos en la muleta de Ponce. Primera oreja.
La siguiente faena se la brindó Ponce a un veterano aficionado --103 años recién cumplidos de extraordinario carácter humano y afición sin límites--, partidario suyo. Un compromiso que obligaba mucho por el cariño que se profesan mutuamente. Y así ocurrió lo genial. El animal se movía algo más que el anterior pero sin ninguna clase, y siempre merodeando por el refugio de la querencia. Había que echarle mucha ciencia y coraje al asunto para que aquello resultara, ni más ni menos que un buen compendio de los mejores atributos del mejor toreo. Ponce desgranó las series de lo fundamental, derechazos y naturales, cada vez más largas, muy templadas y con mucho ritmo, sobre la base de la ligazón, la estética y la profundidad.
Y entre series, una deliciosa variedad de apuntes, detalles y remates. El caso de molinetes y molinetes invertidos, cambios de mano por delante y por detrás, el pase de las flores, el de la firma o las trincheras y trincherillas, circulares invertidos y por delante, que según los iba interpretando, por la ligazón y despaciosidad que les imprimía, perdían el carácter de accesorio con el que habitualmente están marcados. Todo de una extraordinaria profundidad. Sí, también los adornos. Por eso, a pesar de atascársele la espada, le dieron la oreja que le abría la puerta grande.
Y a todo esto, la tarde, marcada por el revés del ganado, no dio de si para los otros dos toreros. Manzanares cargó con un primer marmolillo que se agarró al piso haciendo imposible cualquier proyecto de faena. El quinto tampoco aguantó, ni llevándole a media altura.
El local y modesto Esteve intentó pelearse con dos bueyes que se lo pusieron muy difícil. Así que bastante con haber salido indemne.
Fuente: www.diariocordoba.com
Da comienzo la primera feria importante de la temporada. Una plaza de primera, si bien de nunca el ganado ha sido muy exigente. En este año tampoco aparecen ganaderías de mucha exigencia y si de corte comercial. Pero es la primera feria que tradicionalmente suele marcar la temporada de algunos toreros y queremos preguntarles su pronóstico.
Para mejor ilustrar su voto y comentario, les ofrecemos los carteles completos.
Sábado 8 de Marzo. Toros de Guardiola Fantoni para López Chaves, Paco Ramos y Óscar Sanz, que tomará la alternativa.
Martes 11 de Marzo. Toros de María José Barral para Uceda Leal, Javier Rodríguez y Serafín Marín.
Miércoles 12 de Marzo. Toros de Los Bayones para Curro Díaz, Miguel Abellán y Antón Cortés.
Jueves 13 de Marzo. Toros de Núñez del Cuvillo para Vicente Barrera, José Tomás y Tomás Sánchez.
Viernes 14 de Marzo. Toros de Montalvo para Pepín Liria, Juan Bautista y Matías Tejela.
Sábado 15 de Marzo. Toros de Jandilla para Rivera Ordóñez, El Juli y El Fandi.
Domingo 16 de Marzo. Toros de Fuente Ymbro para El Califa, El Cid y Miguel Ángel Perera.
Lunes 17 de Marzo. Toros de Las Ramblas para Enrique Ponce, El Cid y César Jiménez.
Martes 18 de Marzo. Toros de Gutiérrez Lorenzo para El Capea, Alejandro Talavante y Cayetano.
Miércoles 19 de Marzo. Toros de Juan Pedro Domecq para Enrique Ponce, José María Manzanares y David Esteve.
Un magistral Enrique Ponce cortó ayer una oreja en Valencia por una faena que había dedicado al nieto mayor de los Reyes de España, el Infante Felipe Juan Froilán, en un festejo en el que también obtuvo un meritorio trofeo César Jiménez.
Se lidiaron toros de Las Ramblas aceptablemente presentados aunque con sospechas de manipulación en las astas, flojos y descastados, y de pésimo juego a excepción del tercero, que resultó fácil para el torero.
Enrique Ponce: pinchazo, otro hondo y dos descabellos (silencio tras dos avisos); y estocada (aviso y una oreja con petición de la segunda pitos al palco por denegarla).
Manuel Jesús El Cid: media tendida y ligeramente atravesada (silencio tras aviso); y estocada (silencio).
César Jiménez: pinchazo y casi entera (una oreja); y dos pinchazos, estocada y tres descabellos (silencio).
Un poderoso Ponce doblegó las aviesas intenciones del cuarto toro, llevándole muy cosido a los engaños para evitar que se le viniera encima. Puesto que se frenaba en el centro de las suertes, sin humillar, y midiéndole constantemente. Faena a más, con rúbrica de una estocada en el mismo hoyo de las agujas.
Fue faena fácil y bonita, de mucha seguridad pero ni mucho menos con los intríngulis que tuvo la de Ponce, entre otras cosas por la enorme diferencia en el comportamiento del toro. Y no se trata de restarle méritos al madrileño, cuyo trofeo vale también su peso en oro.
La tarde no tuvo más. Ni Ponce en el primero, ni Jiménez con el difícil sexto (sí en el tercero), ni El Cid, que no tuvo tela que cortar en su lote también imposible, pudieron hacer nada.
Fuente: www.elperiodicodearagon.com
Efe.
Ganadería: Toros de Jandilla, aceptablemente presentados, nobles y justos de fuerzas, que dieron buen juego.
Francisco Rivera Ordóñez: estocada desprendida y dos descabellos (silencio); y estocada caída (vuelta tras petición).
Julián López ´El Juli´: estocada (una oreja); y pinchazo y gran estocada (una oreja).
David Fandila ´El Fandi´: metisaca, media y descabello (silencio); y estocada (dos orejas).
Plaza: Valencia. La plaza tuvo lleno de "No hay billetes" en tarde despejada y agradable, a pesar de una ligera brisa que a ratos molestó en el ruedo.
La inquietud de los toreros, de siempre, de llenar las plazas y cobrar más que nadie, este año se acentúa en Valencia por el fenómeno José Tomás. El hecho de acabar el papel un jueves y con dos toreros de escaso tirón, como hizo el de Galapagar, es un reto para los que vienen detrás y están arriba. Le pasa a El Juli y a Enrique Ponce, a éste además teniendo en cuenta que Valencia es su plaza. Un Juli que eligió fecha de fin de semana y con dos toreros mediáticos , que sin duda ayudan mucho en la taquilla. Lleno asegurado. Pero ojo con el público cuando la afición es sensiblemente minoritaria. Público fácil y aplaudidor, y al tiempo consentido. Quieren lo que quieren, esté reñido o no con la ortodoxia. Casi siempre pasan de lo bueno.
Un ambiente fácil para los de los efectos especiales y más severo para quien va con la verdad y la pureza por delante. Por eso a El Juli le costó mucho más el triunfo. Y precisamente también por eso ese triunfo tiene todavía más méritos.
Un Juli muy metido en la corrida desde el saludo de capa a su primer toro. Los pitos que le exigían de las banderillas, después de tantos años sin ponerlas, delataban la ignorancia de una importante mayoría en el tendido, incomodando al torero cuando iba a coger la muleta. En la faena, no obstante, superó todos los inconvenientes al ponerse el torero sin titubeos en el sitio justo, donde el toro respondía con la mayor emoción. También el trasteo se resolvió en una notable cota artística. Así cayó la primera oreja.
Y en el quinto todavía más. Otra vez la cantinela de las banderillas. Pero otra vez afloró en seguida lo mejor de su toreo: colocación, altura y velocidad. El Juli esperó y llevó al toro desde el primer muletazo con extraordinaria exactitud y limpieza. Crecieron las series en cantidad y calidad, elocuente expresión de mando, poderío y torería. Y las lanzas se volvieron definitivamente cañas en el tramo final. Fin de fiesta de auténtico frenesí. Ahí le dio El Juli marcha a los de la protesta ignorante: un circular doble sin salirse el toro del carril, otro circular de un sólo tramo, un ocho de trazo perfecto, y el arrimón a base de pases del desdén, recortes y alardes. El toro, completamente rendido. Y no se diga el público. Un pinchazo antes de una gran estocada dejó la cosa en una sola oreja.
Rivera desaprovechó su primero, cortándole el viaje en un trasteo que planteó de las rayas hacia dentro. En el cuarto sorprendió con un tercio de banderillas, con soltura y seguridad, aunque con la muleta volvió a las andadas, es decir los medios y espaciados pases, otra vez tratando de que el toro se parara..
El Fandi en banderillas fue el acabose, con una moviola, un par de poder a poder y otro al violín . La plaza echaba humo. Con la muleta no hubo acople y todo se vino abajo. En el sexto, más de lo mismo y como esta vez entró la espada a la primera, se desató el fervor, y el premio de dos orejas.
Fuente: www.diariodecordoba.com